jueves, 4 de junio de 2009

La casa y la familia.


Bueno llegamos a casa de los viejos a eso de las 4:45 el cuarto estaba listo para recibirnos y hacernos descansar del viaje, que estuvo agotador por varias circunstancias. Una vez que nos despertamos, la comida estaba lista, Conce dispuestísima a atendernos, mi viejo también pendiente para comer juntos, Lilian no estaba porque se fue a la playa; era sábado en la mañana, y fin de semana largo pues había pasado el 1° de mayo. La verdad no se que tanto escribir porque siempre que voy a casa es como si nunca hubiera partido, como si los días no hubieran pasado, siempre ha habido atención, siempre han estado las arepas al día, juguitos, gritos alrededor de la mesa, compartir una noche de cervezas y conversa, ver una película o dos o tres ;-) mi abuela María con sus 87 años (ya con achaques), comiendo a la par de todos contenta siempre con su sonrisa por ver a su nieto, el chupe que no puede faltar, ese lo hicimos el domingo día de las madres y estuvieron ahí mi pana del alma Marcazo, fue la gorda (mi hermana Renée) con mi prima Caricia, los viejos, repetición de platos, Tania junto a María, dame mas, Conce ¡tranquila! y Luz que no entiende nada jajaja, Lilian sigue gritando... Así es la casa, con sus altibajos como todas las casa, con sus extrañezas y con su cariño y sus cosas inentendibles, Lilian llego de la playa (el 3) y estábamos en casa de Tania que nos había invitado a comer y a tomarnos unos ¡wisquies!, su apartamento está muy bien ubicado, tiene una vista tremenda, muy estresante, esta Birra para distraernos ya un poco más educada después de varios capítulos de “El encantador de perros” habíamos comido un asado negro con su respectivo arroz y ensalada. El Marcazo nos invitó a comer cachapas ese mismo día 3 en la noche así que partimos a su casa en la noche y estuvimos ahí hasta pasada la hora de la cenicienta, estuvieron muy buenas las cachapas y la conversa, Karina su esposa también estaba y bueno….. muy chévere pues, otros wisquisitos.


Ahí en la casa pasamos la mayoría del tiempo de nuestra estadía en Venezuela, sé que mis padres quedaron muy contentos y espero que estén tranquilos por nosotros, porque estas locuras no pararán hasta que deban hacerlo y estoy muy feliz por ello. Gracias viejos y hermanos y panas por las atenciones y el cariño.

1 comentario:

  1. Tan bellos; se les quiere mucho, sigan conociendo, disfrutando y haciendo lo que más les gusta.
    Los Quiero mucho!!
    Ah! ya dije que los quiero?
    jajaja.
    La Gorda, o sea YO, Renée.

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