viernes, 11 de diciembre de 2009

Rosarito.

Jueves, pasa Marco a recogernos, llegó a prisa y así seria todo el tiempo jaja, también es eléctrico mi compa si pudiera tener 8 celulares y atenderlos al mismo tiempo lo haría, es el encargado del instituto de Cultura de Baja California en Rosarito, a una hora mas o menos de Tijuana, partimos por la carretera vieja para que conociéramos algo del camino, muy lindo todo, hay un antiguo estudio de Fox donde se grababan películas y otras cosas que ya no es de Fox porque a Fox ya no le convenía tenerlo y lo vendió, ahí está, no sé que hacen pero ahí está, también se ve artesanía, casitas, mar y todo aquello que hemos estado viendo desde que partimos pero con su particularidad y aridez de desierto norteño, bonito. Llegamos a Rosarito; dejamos atrás Rosarito… - caray a donde vamos? - es que la presentación no es en Rosarito central, en la ciudad, es en un hotel en el cual el administrador a manera de apoyo al desarrollo cultural de la localidad brinda el espacio para que el ICBC haga presentaciones varias durante el año entero,
- ahhhh que chévere.


Hotel 5 estrellas, cuarto más grande que departamento de Buenos Aires, vista uffff… el Pacifico por todos lados, gaviotas que se posan en nuestro balcón, un día esplendido y nosotros sin traje de baño para la piscina porque nos dijeron que el frío era extremo – Carachos!!, bueno chicos dense su tiempo que más tarde llega el sonido, hacemos prueba y listos para la noche pues.
Hicimos tiempo, comimos, paseamos por las instalaciones, tomamos fotos, bajamos al mar, tomamos mas fotos, volvimos a subir, siguen las fotos, ¡qué lindo todo! Chévere pues, al cuarto a buscar las cosas el sonido ya está llegando, a la sala de conciertos, la gente del sonido ya estaba instalando, llegaron hace rato pero no quisieron subir a molestar. La noche estuvo tremenda, Cesar, el Administrador, quedó muy complacido al igual que Marco y su equipo, la sala estuvo llena, el público chévere y bueno la tertulia de sobre mesa fue corta pero contundente pues mientras amenizábamos con Cesar, el tipo nos ofreció que pasáramos la mañana siguiente por el Spa y nos hiciéramos un cariño corporal para seguir el viaje así que luego de despertarnos y tomar desayuno, partimos al Spa, no recuerdo el nombre de la encargada pero no había llegado y esperamos un ratito por ahí dando vueltas, tomando mas fotos a las gaviotas en la piscina; volvimos y ya estaba ahí, nos explicó la onda, preguntó si queríamos que nos exhumaran las células muertas con una exfoliación de limón y que se yo que otra vaina rica que tenían ahí, ¿Qué tipo de masaje van a querer? Les recomiendo el sueco; vamos por el sueco, las chicas que serán sus masajistas son las número uno del centro… !Coñoooooooooo, que rico que estuvo eso!, salimos muy estresados como comprenderán gente, no por el Spa en sí, ni por el sauna, sino por el hecho de saber que esa era la primera vez y quien sabe cuando se presentaría la próxima oportunidad; ayyyyyyyy que vida tan dura.

Llegó Marco a buscarnos, nos despedimos de Cesar, tomamos esta vez la autopista, nos dieron el mapa carretero para que no nos perdiéramos (ahí tienen la foto), viajamos al costado del muro al entrompar Tijuana y llegamos a nuestro destino, de ahora en adelante la morada será la casa de Carlos y Elvia y como ya dije ¡Que mal la vamos a pasar! ;-)

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