
Luego del concierto que brindó para los troperos, hicimos contacto con Gerardo Alfonso para ver si lo visitábamos y así saber un poco mas acerca de su trabajo, conocerlo mas a él y su onda, el compadre aceptó y concertamos la cita, vive en el mismo edificio que Santiago, el conocido por los Habaneros como “El Fama y Aplausos” allí nos presentamos el día y hora pautados, nos recibió con su chamito de tres años creo y tuvimos una tarde súper amena con el compa, nos contó un montón de anécdotas e historias que inspiran sus canciones, nos acompañaron Glenda y Vani, apareció su esposa con el otro hijo, conversamos y conversamos hasta que hubo que irse, con mucha pena pero gran agrado y llevando en el bolsillo a un nuevo pana… de seguro nos encontramos en le camino, ojala así sea.
En Lima hicimos amistad fuerte con Carlos León, el compa vive hacia el centro de la ciudad y aquella vez que abandonó Perú, dijo que le encantaría tenernos alguna vez en su casa, se cumplió su deseo y claro está que fue un gustazo para nosotros, Carlos tiene dos chamos, es director de cine y ha hecho varios documentales importantes en la isla, fue a buscarnos al paradero con una cachucha de Venezuela y un llavero del Perú, para darnos la bienvenida a su barrio (ya nos habíamos visto varias veces durante el encuentro) nos llevó a su casa y nos habló de su chamba, su familia, la historia de los muebles de la morada, compramos un ron uffff, unas chelas heladitas y nos mudamos a la cocina, donde se iba a preparar la ensalada con aguacate y un arroz imperial que señoras y señores del bolero… le quedo de muerte carachos. Hubo que irse luego de una tarde muy chévere y amena y de unos ronquidos de este pechito a quien las cervecitas y el ron le dañaron las bujías jajaja, pero mi pana le damos mil gracias por compartir con nosotros y dedicarnos un tiempo y un espacio en el corazón al igual que te agradecemos esa emoción con la que nos presentaste en Fresa y chocolate, después de tantos años de esperar poder hacerlo en algún show que diéramos en tu tierra.
Otra reúna fue en casa de Sibvio y Cabmen (se que no se escribe así pero trato de que ustedes puedan pronunciar un cubano plus cuan perfecto al leer fonéticamente sus nombres ;-) ) allí nos juntamos con Yosvany, su esposa, su chamito, una amiga de Carmen que fugó lueguito, Diego Cano y al final llegó Malena con su peor es nada que carambas... no recuerdo el nombre; fue una noche de canto, ron, calor, conversa y clases de maracas, llevamos unas pizzas para amortiguar el hambre y la reunión duró lo justo y necesario, Ya habíamos estado en la casa de los chicos una tarde que nos invitaron a almorzar, Silvio se lució en la cocina con una rica comida, conocimos a Mártin, su chiquito que no es tan chiquito el wey, hubo reencuentro, historias del viaje que ellos hicieron también por tierras sudamericanas, anécdotas y cariño, el punto esencial y principal de todas estas reuniones y de este viaje.
Los troperos prepararon una despedida para los colombianos y peruanos, en casa de Estela, hermana de Mandi, cuñada de Ebianca, allí la cosa estuvo rica pues el arroz chino hecho en casita fue el plato principal, la turca que se jaló Joel (una chica de Turquía) una tarde después de una de las tocadas que hicimos y que después de esa no se separó del grupo se vaciló un montón, había bastante gente, no alcanzó pa’ repetir carachos, ya eran los últimos vestigios del encuentro aunque este había terminado, pero quedábamos troperos internacionales todavía y eso es motivo para juntarse y pasarla lo mejor que se pueda, guardar nostalgias para otros encuentros o momentos en que la vida nos junte… gracias chicos por las atenciones y ojala nos veamos pronto.
Por último debo mencionar que la casa de Malena fue el punto de reunión extraoficial del encuentro en igualdad al parque Lennon jajaja, allí o empezaba la cosa o terminaba, linda persona la Male caray, como nos atendió, como nos quiso, como nos dio cariño carambas… Besossssss.
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