Nuevos panas en Estocolmo.

Nuestro pana el Pancho Villa, nos dio el dato de unos amigos suyos en Suecia, los locos aceptaron el reto y nos invitaron a su ciudad, estuvieron esperándonos en el aeropuerto a pesar de que llegamos a una hora imprudente si así se puede llamar, ya era bastante tarde, pero en el aeropuerto pudo escucharse apenas salimos, un acento “Poh” que decía nuestros nombres y se acercaba a propinarnos un abrazo con sonrisa. En realidad eran dos acentos poh, ahí estaban Pepe y Mary, esposos, pareja de canto, papás, abuelos y locos, está mal decirlo tan luego pero esa hermosa gente está particularmente fuera de si jejeje. Llegamos a casa y nos dieron la bienvenida un perro muy viejo (pastor alemán) y un gato, la única hija que les queda bajo su tutela estaba durmiendo y el hijo mayor no había llegado porque tiene horario de ultratumba en su trabajo. Nos ubicaron en nuestra habitación, el frio que esperábamos no fue el frio que esperábamos, más bien estaba templado el clima, para uso de chaqueta pero sin otros implementos disfrasativos (uyyy como escribo, como escribo). El pana Pepe a 0° anda en manga de camisa jaja, está loco ese wey.

Conversamos un poco, comimos alguito para apaciguar el viaje, tratamos de aprendernos los nombres de los animales y luego de algunas explicaciones pertinentes y reconocimiento del terreno, nos fuimos a dormir, mañana hay que levantarse temprano para ir a trabajar.

El Pepe (chileno plus cuan perfecto) sale a almorzar cerca de las doce del medio día, casi todos los días que estuvimos por estos lares el compadre pasaba por casa a llevarnos un par baguettes calientitas, recién salidas del horno o llamaba para ver en que andábamos y aprovechaba para recogernos y dejarnos en algún lugar de la ciudad, o mejor dicho en la estación del tren (carisimoooooo) con instrucciones de ida y vuelta, mira que acá todo está escrito en sueco y es conflictiva la cosa, no entendíamos nada de nada. Un día nos falló la baguette, a pesar de que su representante pasó por casa de igual manera, ese fue un día triste . Mary se va tempranito a trabajar, ella utiliza el transporte público, no nos compra baguette pero nos atiende de maravillas ;-)

Por lo demás solo puedo decir que estos dos chicos, que llevan en este país más de veinte años, son lindas y maravillosas personas, ya les contaré un poco más acerca de ellos.